La digitalización es un fenómeno que ha transformado profundamente diversos sectores, y la seguridad y salud en el trabajo no es una excepción. En el contexto de un futuro próximo, la rápida implementación de tecnologías digitales plantea tanto oportunidades como desafíos significativos para la seguridad laboral.
La Transformación del Entorno Laboral
El avance de la digitalización conlleva cambios sustanciales en los procesos de producción y la organización del trabajo. Estos cambios no solo permiten una mayor automatización de tareas y una reducción de la exposición a entornos peligrosos, sino que también generan nuevos riesgos. La introducción de tecnologías avanzadas, como la robótica y la inteligencia artificial, puede aumentar la carga cognitiva y psicológica de los trabajadores, incrementando el riesgo de trastornos musculoesqueléticos (TME) y otros problemas de salud.
Uno de los principales desafíos es la exposición a nuevos agentes biológicos, químicos y nanomateriales, que surgen con la evolución de las tecnologías de producción. La intensificación del trabajo y la necesidad de adaptación constante a nuevas herramientas digitales también pueden generar estrés y afectar el bienestar psicológico de los empleados.
Escenarios Futuros para la Seguridad Laboral
La Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo (EU-OSHA) ha proyectado varios escenarios para 2025 que destacan los riesgos emergentes vinculados a la digitalización. Entre estos se encuentran:
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Automatización de Tareas: La automatización puede reducir la exposición a entornos peligrosos, pero también introduce riesgos laborales relacionados con la falta de transparencia de los algoritmos y las interacciones complejas entre humanos y máquinas.
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Uso de TIC: La creciente utilización de tecnologías de la información y la comunicación (TIC) transforma el ritmo, la naturaleza y la supervisión del trabajo, lo que aumenta la relevancia de los riesgos psicosociales, como el estrés y la presión laboral.
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Supervisión Digital: La incorporación de sensores inteligentes y dispositivos móviles para la supervisión del trabajo puede incrementar el control sobre los empleados, generando un ambiente de mayor estrés y presión constante.
Impacto de las Tecnologías Digitales Según la Encuesta OSH Pulse 2022
Según la encuesta OSH Pulse 2022 de la EU-OSHA, un 19,2% de los trabajadores europeos indican que las tecnologías digitales se utilizan para controlar factores como el ruido, sustancias químicas y gases en el entorno laboral. Además, un 7,4% señala que estas tecnologías se emplean para monitorear constantes vitales, como la frecuencia cardíaca y la tensión arterial.
Estos datos reflejan tanto los beneficios como las preocupaciones que la digitalización trae consigo. Si bien las tecnologías permiten un mayor control sobre los riesgos físicos en el lugar de trabajo, también pueden contribuir al aumento de la carga laboral y la disminución de la autonomía de los trabajadores.
Oportunidades y Retos Derivados de la Digitalización
A pesar de los desafíos, la digitalización ofrece oportunidades significativas para mejorar la seguridad y salud en el trabajo:
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Reducción de Riesgos Físicos: La automatización de tareas peligrosas y la asistencia de la robótica pueden reducir la exposición a riesgos físicos.
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Mejora del Rendimiento: Dispositivos como exoesqueletos pueden ayudar a mitigar la fatiga y mejorar el rendimiento físico de los trabajadores.
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Inclusión Laboral: Las tecnologías digitales facilitan el acceso al mercado laboral de personas con discapacidades y aquellos en zonas con menos oportunidades de empleo.
Sin embargo, estos avances vienen acompañados de retos importantes. La digitalización puede llevar a una pérdida de autonomía, con una supervisión más estricta y una fragmentación de las tareas que pueden reducir la satisfacción laboral y aumentar la presión sobre los empleados.